En Cuba la fecundidad ha alcanzado niveles en extremo bajos, por debajo del de reemplazo en la tasa neta de reproducción. La estructura de la fecundidad muestra una cúspide temprana, constatándose un aumento en el peso de la fecundidad de las mujeres menores de 20 años. Junto al aumento en la proporción de casadas se aprecia un incremento en las uniones consensuales, en las cuales se observan mayores niveles de fecundidad. A partir de los 30 años, las cubanas realizan un control mucho más efectivo de la cantidad de hijos prevaleciendo en ellas la esterilización. A nivel de los determinantes próximos de la fecundidad, la anticoncepción desplazó en importancia a la nupcialidad.