Informe de actividades del grupo de iniciativa del grupo de trabajo sobre estadísticas ambientales

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Informe de actividades del grupo de iniciativa del grupo de trabajo sobre estadísticas ambientales

Resumen

América Latina y el Caribe es una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo, así como una de las más ricas en recursos naturales, con economías que dependen en gran medida de la utilización de esos recursos para el crecimiento económico y el desarrollo humano. A excepción de lo que ocurre en México y Brasil, gran  parte de las exportaciones de los países de la región se basan en materias primas, como minerales, productos  agrícolas y forestales e hidrocarburos, es decir que requieren un uso intensivo de recursos naturales. Otras actividades de producción, como la industria, el transporte y el turismo, de gran importancia en los países del Caribe, generan contaminación y ejercen importantes presiones en el medio ambiente. Es así como la explotación del capital natural que nutre a un gran número de economías de la región, más allá de su sostenibilidad, pone en entredicho el desarrollo de los países latinoamericanos y caribeños, comprometiendo a las generaciones presentes y futuras.Los problemas ambientales que enfrenta América Latina y el Caribe son múltiples y complejos. La  región  se  ve  amenazada  por  una  urbanización  extensa  y  no  planificada,  la  degradación  de  los ecosistemas (cuencas, bosques y mar, entre otros); y la reducción de la biodiversidad; además, se observa una creciente contaminación de los recursos hídricos, los suelos y el borde costero, así como una creciente vulnerabilidad ante el cambio climático. Esta realidad plantea el desafío de un desarrollo sostenible como condición sine qua non para asegurar el desarrollo económico y el futuro de las próximas generaciones latinoamericanas y caribeñas.En los últimos 30 años se ha avanzado significativamente en el proceso de institucionalización de los temas ambientales en América Latina y el Caribe mediante la aprobación de leyes y el establecimiento de  ministerios  y  secretarías  de  medio  ambiente,  junto  con  la  creciente  participación  en  acuerdos ambientales internacionales y regionales. La sociedad civil también está jugando un papel fundamental en las actividades de desarrollo y protección del medio ambiente. Indudablemente, el tema ambiental ocupa, cada vez más, un lugar importante en las agendas políticas de los países de la región.En  este  contexto,  es  necesario  que  los  países  de  América  Latina  y  el  Caribe  cuenten  con información oportuna y de calidad sobre la situación del medio ambiente y los recursos naturales para la toma de decisiones y la formulación de políticas públicas sobre la base de evidencias para el logro de un desarrollo sostenible.En respuesta a esta necesidad de información sobre temas ambientales, las oficinas nacionales de estadística y los ministerios de medio ambiente han trabajado en forma progresiva para formalizar la recopilación de estadísticas, indicadores y cuentas ambientales. Estos esfuerzos han sido heterogéneos y fructíferos. En la última década se ha podido observar la creación de un mayor número de instituciones con programas de estadísticas ambientales en la región y un mayor número de ellas cuenta con unidades dedicadas   exclusivamente   a   su   recopilación.


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Resumen
América Latina y el Caribe es una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo, así como una de las más ricas en recursos naturales, con economías que dependen en gran medida de la utilización de esos recursos para el crecimiento económico y el desarrollo humano. A excepción de lo que ocurre en México y Brasil, gran  parte de las exportaciones de los países de la región se basan en materias primas, como minerales, productos  agrícolas y forestales e hidrocarburos, es decir que requieren un uso intensivo de recursos naturales. Otras actividades de producción, como la industria, el transporte y el turismo, de gran importancia en los países del Caribe, generan contaminación y ejercen importantes presiones en el medio ambiente. Es así como la explotación del capital natural que nutre a un gran número de economías de la región, más allá de su sostenibilidad, pone en entredicho el desarrollo de los países latinoamericanos y caribeños, comprometiendo a las generaciones presentes y futuras.Los problemas ambientales que enfrenta América Latina y el Caribe son múltiples y complejos. La  región  se  ve  amenazada  por  una  urbanización  extensa  y  no  planificada,  la  degradación  de  los ecosistemas (cuencas, bosques y mar, entre otros); y la reducción de la biodiversidad; además, se observa una creciente contaminación de los recursos hídricos, los suelos y el borde costero, así como una creciente vulnerabilidad ante el cambio climático. Esta realidad plantea el desafío de un desarrollo sostenible como condición sine qua non para asegurar el desarrollo económico y el futuro de las próximas generaciones latinoamericanas y caribeñas.En los últimos 30 años se ha avanzado significativamente en el proceso de institucionalización de los temas ambientales en América Latina y el Caribe mediante la aprobación de leyes y el establecimiento de  ministerios  y  secretarías  de  medio  ambiente,  junto  con  la  creciente  participación  en  acuerdos ambientales internacionales y regionales. La sociedad civil también está jugando un papel fundamental en las actividades de desarrollo y protección del medio ambiente. Indudablemente, el tema ambiental ocupa, cada vez más, un lugar importante en las agendas políticas de los países de la región.En  este  contexto,  es  necesario  que  los  países  de  América  Latina  y  el  Caribe  cuenten  con información oportuna y de calidad sobre la situación del medio ambiente y los recursos naturales para la toma de decisiones y la formulación de políticas públicas sobre la base de evidencias para el logro de un desarrollo sostenible.En respuesta a esta necesidad de información sobre temas ambientales, las oficinas nacionales de estadística y los ministerios de medio ambiente han trabajado en forma progresiva para formalizar la recopilación de estadísticas, indicadores y cuentas ambientales. Estos esfuerzos han sido heterogéneos y fructíferos. En la última década se ha podido observar la creación de un mayor número de instituciones con programas de estadísticas ambientales en la región y un mayor número de ellas cuenta con unidades dedicadas   exclusivamente   a   su   recopilación.
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